El designio de la luna frente a la rectitud del calendario; la tradición de siglos frente a la unidad del cristianismo. La propuesta lanzada por el Papa Francisco de buscar una fecha fija para la celebración de la fiesta central de los cristianos, la Resurrección, (el segundo domingo de abril, se plantea por ahora en el Vaticano), va calando poco a poco entre los cofrades de la ciudad, que se plantean ahora cómo sería esa Semana Santa que se iniciaría siempre el primer domingo de abril. En el día de ayer se iban produciendo reacciones a la posibilidad que el Pontífice planteó hace unos días a un grupo de sacerdotes en la basílica de San Juan de Letrán, y de la que este periódico se hizo eco el domingo en su sección La Tribuna Cofrade.
"Si el Papa lo dice, no hay nada que objetar", es el punto de partida del sector cofradiero, resumido en esta frase lanzada por el presidente del Consejo, Martín José García. Pero es que además no se aprecian, a priori, efectos negativos en esa idea de dar estabilidad de fechas a la celebración de la Resurrección; y, con ello, a la Semana Santa y la Cuaresma.
El delegado diocesano de Hermandades, Juan Enrique Sánchez, manifestaba en el día de ayer que la propuesta lanzada por Francisco "es positivo a nivel ecuménico, porque nos unifica y eso es bueno". De hecho, el delegado episcopal indica que ha estado en dos ocasiones en Tierra Santa "y allí se ve como muy curioso que la Pascua se celebre en fechas distintas para católicos y ortodoxos". Además de este aspecto, Sánchez indica que con la medida "las fechas no fluctuarían tanto como ahora". "Pero estamos hablando de un futurible", precisa el sacerdote recientemente nombrado párroco de La Palma.
Martín José García ve "magnífico" que se plantee un cambio así. "De cara a la Semana Santa no veo ningún problema para que se lleve a cabo lo que plantea el Papa; no tendría complicación alguna para nosotros, en principio", comentaba al respecto el representante de las hermandades gaditanas. Además, García ve otro aspecto positivo añadido: "más seguridad de cara a los comercios, hoteles... que tendrían unas fechas fijas para su organización y para realizar las campañas, las reservas y apartados de este tipo". Por tanto, luz verde del Consejo de Hermandades si esta posibilidad que contra todo pronóstico ha salido de los labios del Papa llega a buen puerto. "La comunión en la Iglesia es necesaria, y si esta medida va a servir para ello bienvenida sea", concluye Martín José García.
Esta finalidad de unificar el cristianismo es también el aspecto que mejor valora el hermano mayor de la primera hermandad en procesionar por las calles de la ciudad (Borriquita), Ignacio Ortiz. "Es bueno un Papa dispuesto a cambiar por el bien común. La unificación de los cristianos es muy positiva. Y esto no es sino un signo de la bondad del Papa, dispuesto a ceder en aspectos que no son trascendentales por el bien común", comentaba ayer Ortiz.
A nivel cofrade, el máximo representante de Borriquita se debate entre el aspecto positivo de tener siempre una misma fecha -que facilita la labor de organización en la vida interna de la hermandad de un año a otro- y el negativo -"nos quita ese gusanillo de saber si de un año a otro hay más o menos duración", cuenta-. "No sabría definirme; quizás los cambios no me gustan para estas cosas, pero si hay razones de peso, pues será para bien", concluye Ortiz, que en cualquier caso prevé "que aún pasará tiempo para que se aplique la medida" en caso de salir adelante el planteamiento del Pontífice.
Del futuro de esta posibilidad que se plantea la Iglesia dependerá también, lógicamente, la procesión del Resucitado de la ciudad. El hermano mayor de la cofradía de la Resurrección, Sergio Rodríguez, tampoco vería mal que se señalara un domingo fijo en el calendario para esta fiesta. "Afectar no creo que afecte en nada. Y nos aportaría hasta cierta tranquilidad el saber siempre que el segundo domingo de abril sería el de Resurrección, porque para la organización de la Cuaresma y de todos los cultos sería positivo. Pero vamos, en cualquier caso, todo es cuestión de acostumbrarse", comenta Rodríguez al respecto de esta cuestión.
La buena acogida generalizada por parte de los cofrades a la medida planteada por el Papa Francisco sólo tiene un aspecto negativo que ha sido señalado por la mayoría: la lluvia. "El aspecto climatológico quizá sería más difícil, por la experiencia que acumulamos", comentaba Sergio Rodríguez, coincidiendo también en lo apuntado por el hermano mayor de Borriquita o por el delegado de Hermandades. Y es que ya lo dice el refrán: "en abril aguas mil". Como bien saben los cofrades.
"Que el Papa se ponga de acuerdo con Villanueva", bromeaba ayer Antonio Martín, quien siempre ha defendido que el Carnaval cuente con una fecha fija, un debate que viene de lejos, prácticamente desde que se disparó el número de agrupaciones y el Concurso del Falla se pegó a la festividad de los Reyes Magos. Carnavaleros ayer consultados acogían de buen grado la posibilidad de que el COAC, si la propuesta de Francisco I sale adelante, no se acerque a la Navidad y las agrupaciones puedan preparar su participación en el mismo sin la presión que supone salir de los Reyes y meterse de lleno en el Falla. Esto es lo que ocurrirá en 2016, ya que las tempranas fechas del Carnaval -el primer sábado cae en 6 de febrero- obligaría a la organización del COAC a abrir telón para la fase clasificatoria el 10 de enero, una fecha estimativa apuntada por Miguel Villanueva, presidente de la Asociación de Autores, siempre y cuando el año que viene se inscriba un número de grupos similar al de 2015. Y como la propuesta del pontífice se trataría en un concilio del año que viene que aún no tiene fecha, Martín aprovechaba para pedir que el Carnaval se adelante a las intenciones del Papa y coloque ya una fecha fija para 2016. "Preveo una fiebre de comparsas que puede elevar mucho el número de grupos. Sería un buen momento para poner la fecha fija. ¿Que está la fecha puesta ya en el cartel del Carnaval? Se corrige y punto. Todavía no habrán editado los carteles en la imprenta, supongo", comentaba el coplero. De darse un mayor número de grupos, Martín avisa que si no se quiere poner una fecha fija, "habrá que volver a las sesiones de tarde y noche, no hay otra opción. Yo no me apunto a un Concurso que empiece antes de Reyes y cualquier año nos vamos a ver así". Para el veterano autor, lo ideal sería "que los dos fines semana del Carnaval coincidieran siempre con los dos últimos de febrero".
Joaquín Quiñones, el presidente de los Antifaces de Oro y miembro del Patronato del COAC, estima que aunque la propuesta papal no saliese adelante, el Carnaval debería celebrarse separado de la Navidad y con tiempo suficiente antes de Semana Santa "para no herir susceptibilidades". El coplero, ahora en dique seco, recordaba que ya el Carnaval de Cádiz "pisa" en algunos días la Cuaresma "y no digamos ya algunos de los carnavales de la provincia que se celebran una semana después del de la capital". Quiñones añadió que la idea de Francisco I le parece "ideal". "A ver si le hacen caso", concluyó.
"El Papa está mirando por el Carnaval", señaló José Antonio Vera Luque antes de calificar esta iniciativa como "de categoría", pues se trata de una propuesta que el autor hace tiempo que espera ver materializada. El autor de chirigotas sabe lo que significa que el Concurso se pegue a la Navidad "Se pasa muy mal y es complicado desconectar en navidades si el Concurso está cercano. Es bueno tener un respiro después de los Reyes porque se matizan mejor los repertorios. Creo que los repertorios se resienten cuando el Concurso viene muy pronto", explicó. Coincidió con Antonio Martín pidiendo que Cádiz se adelante a la idea de Francisco I y ponga al Carnaval fecha fija para 2016. "Tenemos que ser prácticos porque en los tiempos que corren no tiene mucho sentido andar pendientes de lo que hagan los cofrades", apuntó. A juicio de Vera, el Carnaval debería "rondar siempre" alrededor de Día de Andalucía, para así posibilitar "que vengan más andaluces" en el puente.
El Concurso 2016, por sus tempranas fechas, preocupa a los carnavaleros. La manera de organizarlo es por ahora una incógnita. Por Cádiz sí se Puede, contrario a la fórmula del actual Patronato, planteaba en campaña que el certamen lo organizaran los carnavaleros. Pronto podrían conocerse las intenciones del nuevo equipo de gobierno.
diariodecadiz
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