“El concurso franquista era menos libre, pero más gaditano”: el polémico análisis del Carnaval de Cádiz en los Cursos de Verano de la UCA
El Carnaval de Cádiz ha sido objeto de una contundente reflexión durante los 75 Cursos de Verano de la Universidad de Cádiz (UCA). En una ponencia cargada de crítica y matices históricos, el investigador José Marquena Domínguez (firmando como Gabriel John Utterson, Abogado) ha desgranado las diferencias fundamentales entre el concurso de agrupaciones durante el franquismo y el actual certamen democrático, lanzando una provocadora conclusión: “el concurso franquista era menos libre, pero más gaditano”.
🎭 Del Dr. Jekyll al Mr. Hyde del Carnaval
En su análisis, Marquena propone una metáfora literaria para ilustrar la evolución del Concurso Oficial de Agrupaciones Carnavalescas (COAC): el Dr. Jekyll como símbolo del concurso domesticado y políticamente correcto, y Mr. Hyde como el espíritu libre y monstruoso del carnaval de la calle.
Según el investigador, el concurso nació con un triple propósito: controlar, organizar y encauzar el carnaval. Esta esencia –heredada desde sus orígenes burgueses del siglo XIX– se mantuvo viva durante la dictadura franquista, cuando el certamen fue instrumentalizado para exaltar el folclore y reprimir la crítica social.
“La censura era la norma, pero el público participaba más y hasta pedía bises. Hoy eso sería impensable”, señala Marquena.
⚖️ ¿Más libertad en democracia o más autocensura?
En uno de los pasajes más incisivos de su intervención, Marquena lanza una pregunta directa: ¿Cuál es la diferencia esencial entre el concurso franquista y el de la democracia? La respuesta sorprende: aunque hoy no hay censura institucional, sí existe una autocensura impuesta por el reglamento, los intereses comerciales y la dinámica competitiva.
“Siempre hubo intereses crematísticos, pero nunca a estos niveles”, afirma, apuntando al protagonismo de la institución municipal y a las dinámicas corporativas que dominan actualmente el carnaval oficial.
🏛️ Crítica a la institucionalización del Carnaval
Marquena sostiene que el actual concurso ha perdido buena parte de su identidad gaditana y folklórica, alejándose de la “copla local” para abrazar repertorios más estándares. La explosión de los medios de comunicación y las redes sociales, a su juicio, ha diluido la esencia genuina del carnaval.
“El concurso jugó a ser necesario, pero terminó por convertirse en un monstruo indomable”, sentencia.
💥 La propuesta: matar al Dr. Jekyll y abrazar al Hyde carnavalesco
Como colofón, Marquena propone una idea radical: “matar” al Dr. Jekyll (el concurso domesticado) y recuperar a Mr. Hyde (el carnaval libre y callejero). Solo así, afirma, se podrá devolver al Carnaval de Cádiz su auténtica esencia de febrero: la de la locura, la crítica, la transgresión y la libertad.
“Aceptemos su monstruosidad bien entendida, y desterremos un certamen represor y empresarial que cada vez representa menos la fiesta popular”, concluyó.
