El Gago reclama un COAC más selectivo: «Cantidad no es calidad; el Carnaval de Cádiz tiene un cupo»
El veterano cuartetero propone limitar las inscripciones al concurso oficial, priorizar a las agrupaciones de la capital y la provincia, y eliminar los incentivos económicos para los grupos que no aportan un nivel mínimo al teatro.
El debate sobre la masificación del Concurso Oficial de Agrupaciones (COAC) en el Gran Teatro Falla ha vuelto a cobrar fuerza tras las contundentes declaraciones de una de sus figuras más emblemáticas del cuarteto, El Gago. El autor y componente ha abogado por una reestructuración profunda del certamen, defendiendo que el actual modelo de preliminares interminables daña la imagen del Carnaval y agota tanto al público como a los propios participantes.
Contra las finales maratonianas
Uno de los puntos más críticos señalados es la duración de la Gran Final. El Gago defiende la vuelta al modelo de tres agrupaciones por modalidad (12 en total), calificándolo como el formato «perfecto». «Cantar a las cinco de la mañana es un despropósito», ha manifestado, relatando cómo el cansancio acumulado tras horas de espera afecta directamente a las ganas y al rendimiento de los grupos sobre las tablas
«Chovinismo» en defensa de la calidad
En una postura que él mismo define como «chovinista», propone limitar el cupo de participantes a un máximo de 10 días de preliminares con seis grupos por sesión. Su plan sería dar prioridad absoluta a las agrupaciones de Cádiz capital y su provincia, dejando las plazas vacantes restantes a los grupos de fuera.
«Cantidad no es calidad», sentencia el cuartetero, comparando el COAC con un Mundial de fútbol donde debe haber un nivel mínimo. El autor critica que lleguen grupos de fuera que, a su juicio, no aportan nada diferente al concurso: «Si no aportan nada, que no vengan; ya tenemos aquí cuartetos sin gracia y comparsas desafinadas suficientes»
El Carnaval de calle frente al concurso
El Gago establece una distinción clara entre la libertad de la calle y el rigor que debe imperar en el teatro. Mientras que en la calle celebra que «venga todo el que quiera» y propone mejorar la oferta de ocio para jóvenes en zonas como La Punta para descongestionar el centro, considera que el concurso debe ser selectivo. «El concurso no es cuna de la libertad; es una competición y debe ser atractiva para el que escucha», subraya.
Propuesta de autofinanciación
Para frenar lo que considera una inscripción masiva y poco profesional, el autor propone eliminar los pagos por derechos de televisión a grupos que solo participan en preliminares. En su lugar, sugiere que las agrupaciones paguen una cuota de inscripción no reembolsable. «Si tú quieres venir porque tienes mucha fe, pues paga la pista; esto sale de los impuestos de los gaditanos», afirma, comparando la situación con los antiguos maratones de fútbol sala donde los equipos debían abonar una fianza para participar.
Con estas medidas, El Gago busca devolver al COAC el prestigio y la agilidad perdidos, garantizando que cada minuto sobre el escenario del Falla sea una muestra de la excelencia que el «tan famoso Carnaval de Cádiz» proyecta al mundo.
